Hablamos con Wasim, un refugiado palestino-sirio que necesita nuestra ayuda. Nos ha contado su historia, y es ésta:
Conocí a Wasim este verano. Me pareció una persona muy amable y educada. Lo primero que pensé cuando Wasim me dijo que era palestino criado en Siria, es que era de esas personas condenadas a estar injustamente en el medio, en tierra de nadie. Marcado por sus orígenes, su situación es fruto del caos, de la persecución y de la tragedia. Pero Wasim al contrario que otros, no se siente fuera de lugar, y ha empezado a construir una nueva vida y a resurgir de sus propias cenizas. Pero no se lo ponen fácil.
De padres palestinos, creció en Daraa, al sur de Siria en un campamento de refugiados palestinos. Wasim no tuvo ni tiene, nacionalidad, es apártida, el gobierno sirio no le otorgó nacionalidad a los refugiados palestinos. Cuando Wasim alcanzó la mayoría de edad, decidió estudiar la carrera de Filología Inglesa en Damasco. Después, se trasladó a vivir a Inglaterra en 2008, y fue nombrado como profesor de inglés en la Universidad de Cambridge. En 2010 retornó a Siria, meses después estallaría la revolución. No dudó en unirse a las primeras manifestaciones en contra del régimen de Asad, por ello en 2012 tuvo que huir de Siria dado que en cualquier momento sería detenido por participar activamente en dichas manifestaciones. Wasim huyó a Turquía para salvar su vida, allí residió dos años de manera ilegal. En 2014 decidió emprender un viaje a Brasil, una vez allí decidió viajar a Madrid. Al llegar, en el mismo Aeropuerto de Barajas pidió el asilo. Desde entonces, reside aquí, pero todavía no se le ha concedido el asilo. Nuestro amigo se encuentra en un limbo burocrático atrapado, que no le permite viajar, ni reencontrarse con su madre y sus dos hermanos que actualmente residen en Alemania.
Wasim habla un castellano perfecto. Se ha integrado de forma maravillosa por su propia fuerza de voluntad. Él está haciendo por si mismo lo que el gobierno español no hace por él, que es regular su situación. Wasim tiene un buen puesto de trabajo con el que está contento, pero no puede tener una vida normal. Dispone de la famosa tarjeta roja, que cada seis meses tiene que renovar, por lo tanto dispone de permiso de trabajo pero no de residencia.
Cuando le pregunto a Wasim por las excusas que le ponen para no agilizar los trámites me contesta "No te dicen nada. He intentado hacer una entrevista con el responsable del expediente y no me dejaron. Y he tenido 2 abogados y nada". Le pido que me escriba un mensaje para transmitirle a la gente y él me contesta indeciso "Bueno que yo no pido mucho. Pido un derecho básico de libertad de movimiento y poder salir y ver a mi familia en Alemania. Yo me gusta el país mucho y estoy muy integrado pero el gobierno me está complicando la vida. Vivo una contradicción, que tengo trabajo y estoy contento por un lado y por el otro lado tengo la inseguridad de no tener papeles"
Wasim tiene voluntad, tiene actitud, tiene unos sueños. Como otros en su situación tiene muchas capacidades y aptitudes de las que todos nos podemos beneficiar ¿Nos ayudas a que Wasim deje de "estar en el medio" y pueda empezar de cero como se merece? Solo tienes que firmar esta petición. Hagamos presión, denunciemos, que vean que no estamos ciegos. ¡Queremos un presente regularizado, seguridad y posibilidad de futuro para todos los refugiados que lleguen!
Enlace para firmar:
https://www.change.org/p/oficina-de-asilo-y-refugio-oar-que-wasim-consiga-su-residencia-en-espa%C3%B1a
Escucha a Wasim, tú podrías estar en su situación.
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